Las plantas sagradas, traen salud, abren nuestro corazón y caminos hacia el conocimiento, ayudan a purificar la mente y las emociones. Ayudan a armonizar las energías en desequilibrio del cuerpo. Una vieja sabiduría popular cuenta que; ” ¡Para cada enfermedad, ha crecido una hierba!" Hay ayudantes especiales en el mundo vegetal que tienen una tarea especial como sanadores y maestros. Han sido plantas sagradas del conocimiento desde tiempos inmemoriales, ayudándonos a sanar nuestros corazones, sumergirnos en los misterios del mundo y beber del pozo del conocimiento. Una historia peruana del "Árbol del Conocimiento" cuenta que todas las plantas son manifestaciones de los colores del arco iris. Por lo tanto, cada planta tiene su propio espectro de color y efecto. Su vibración especial les permite actuar con precisión sobre ciertas regiones del cuerpo.